Todo creyente debe seguir las enseñanzas del Corán y la Sunnah (Parte 1 de 2)

¿Qué es la Sunna?

En el idioma árabe la palabra Sunna significa “camino”, “tradición” y “forma de hacer algo”. En el Islam, la Sunna se refiere al “conjunto de dichos (palabras, enseñanzas, profecías, etc.), hechos (acciones, forma de hacer las cosas, etc.) y confirmaciones o negaciones explícitas o implícitas (como confirmar algo asintiendo con la cabeza, etc.) del Profeta Muhammad (la paz y las bendiciones de Dios sean con él)”.

La Sunna del Profeta fue relatada por sus seguidores y discípulos (Sahabas) (que Al-lah esté complacido con todos ellos). Ellos fueron los que relataron lo que el Profeta dijo, hizo, aprobó o reprobó, a las personas que vinieron después de ellos. Y así, la Sunna se fue transmitiendo de generación en generación. Muchos estudiosos musulmanes pasaron por escrito estos relatos y desarrollaron un método científico que les permitió distinguir entre los relatos falsos y los verdaderos.

¿Qué es un hadiz?

Cada relato de lo que el Profeta (la paz y las bendiciones de Dios sean con él) dijo o hizo se llama en árabe hadiz, que significa “suceso” o “información”. El conjunto de hadices es conocido como “la Sunna”, porque ellos nos enseñan el camino a seguir para ser o hacer como el Profeta (la paz y las bendiciones de Dios sean con él).

Todo lo que el Profeta dijo o hizo con relación a la religión es parte de la revelación de Al-lah. Al-lah inspiró al Profeta para que dijera lo que dijo e hiciera lo que hizo; por lo tanto, la Sunna es también de Al-lah, Glorificado sea.

¿Todo lo que el Profeta decía o hacía, se considera revelación de Al-lah?

Todo lo que el Profeta (la paz y las bendiciones de Dios sean con él) hacía o decía se puede dividir en dos categorías:

  1. Asuntos relacionados con la religión.
  2. Asuntos relacionados con el diario vivir, basados en su experiencia de vida.

Ahora bien, los asuntos relacionados con la religión y la creencia, son parte de la revelación de Al-lah, eso es más que lógico. Por ejemplo, cuando el Profeta (la paz y las bendiciones de Dios sean con él) dijo: “No entrará al Paraíso quien tenga en su corazón un átomo de soberbia y envidia”, estaba siendo inspirado por Al-lah, pues nos está informando acerca de algo que solo Al-lah puede saber, es decir, quiénes no entrarán al Paraíso.

En cuanto a la segunda categoría, no se considera revelación de Al-lah. Por ejemplo, como todos sabemos, el Profeta (la paz y las bendiciones de Dios sean con él) era de La Meca, y La Meca es una ciudad desértica y rocosa donde no se practica mucho la agricultura. Cuando el Profeta llegó emigrante a Medina, vio a la gente de esta ciudad realizando polinización artificial entre las palmeras datileras. Al Profeta (la paz y las bendiciones de Dios sean con él) le extrañó esta práctica agrícola y le dijo a la gente que no le parecía buena. Sus seguidores de Medina asumieron que él les estaba prohibiendo, por orden de Al-lah, el realizar la polinización y dejaron de hacerlo. La época de cosecha llegó y no fue muy buena debido a que no habían utilizado el método de polinización artificial. Los discípulos de Medina se acercaron al Profeta le comentaron lo sucedido y le preguntaron por qué había ocurrido eso si ellos habían seguido sus palabras al pie de la letra. Entonces el Profeta (la paz y las bendiciones de Dios sean con él) se dirigió a ellos con mucha seriedad y les dijo: “Cuando les informe acerca de la religión y la fe, obedézcanme; pero en lo que respecta a sus asuntos mundanales, ustedes saben mejor que yo lo que deben hacer o no hacer”.

¿Dónde podemos encontrar la Sunna?

Como ya mencionamos, los eruditos musulmanes pasaron por escrito los miles de hadices que los Sahabas del Profeta (la paz y las bendiciones de Dios sean con él) relataron a la gente. Muchos de estos eruditos tuvieron que viajar largas distancias con el único objetivo de encontrarse con alguna persona que supiese un hadiz, para poder pasarlo por escrito. En otras palabras, estos eruditos iban “juntando” hadices y escribiéndolos en sus “colecciones”. Algunos eran muy rigurosos y solo escribían en sus colecciones los hadices cien por ciento auténticos del Profeta. Otros eruditos escribían los hadices 100% auténticos y algunos de menor autenticidad. Estas “colecciones” de hadiz son muchas, pero las más destacadas son seis:

  1. La colección del erudito Al Bujari, mejor conocida como Sahih Al Bujari.
  2. La colección del erudito Muslim, mejor conocida como Sahih Muslim.
  3. La colección del erudito Abu Dawud, mejor conocida como Sunan Abi Dawud.
  4. La colección del erudito Ibn Mayah, mejor conocida como Sunan Ibn Mayah.
  5. La colección del erudito An-Nasa’i, mejor conocida como Sunan An-Nasa’i.
  6. La colección del erudito At-Tirmidhi, mejor conocida como Sunan At-Tirmidhi.

Todas estas colecciones se encuentran en idioma árabe, pero existen varias traducciones de ellas. También existen traducciones de otras colecciones fuera de estas seis. En español contamos con la traducción de Sahih Al Bujari, Sahih Muslim, Riad As-Salihin, Al Muwatta’, etc. Estas traducciones se pueden conseguir en diferentes páginas Web de internet.